El escándalo que explotó el lunes tras el tweet de Aníbal Fernández, el humorista gráfico Cristian “Nik” Dzwonik habló de todas las sensaciones que tuvo durante la semana. El afectado por el mensaje mencionó que vivió “una semana angustiante” a raíz no solo de la presunta amenaza hacia él y sus hijas menores, sino también por la llegada mediática y política que el suceso tuvo.
De esta forma, el historietista comunicó que tanto él como las hijas ya están mejor y que, a partir de la semana que viene, volverán al colegio. A través de una entrevista con Radio Rivadavia, Nik indicó que, al arremeter el ministro de Seguridad contra un ciudadano común, la sociedad sintió que “se tocaba una fibra”. A su vez, dijo que la gente sintió “como una especie de símbolo que se iban para otro lado, con los hijos, y ahí hay un límite que no se puede cruzar”, señaló.
En segunda instancia, apuntando a lo laboral (Nik también es dibujante de un conocido medio de comunicación) se le preguntó cómo iba a seguir después de todo lo acontecido. “Yo creo que una parte de la clase política […] que sabe que el miedo es un factor determinante para los que no tenemos tanto poder”, indicó desde su posición de ciudadano que no ostenta ningún cargo poderoso. 
Con respecto a Aníbal Fernández, se le preguntó también si lo había vuelto a contactar. Nik destacó el mensaje que le mandó a pocos minutos del escandaloso tweet (del cuál también se sorprendió por la rapidez con la que consiguió su número privado). No obstante, hizo foco en que Fernández lo contactó “para seguir agrediendo”, al decirle  que “no se le iban a caer los anillos”. 
Al final, Cristian Dzwonik resaltó que nadie del Gobierno lo llamó. Así, Nik dijo que los únicos que salieron a decir algo relacionado al escándalo fueron Leandro Santoro y Juan Manzur, aunque de un modo forzado y no genuino. También dijo que se está trabajando en la denuncia que le realizará a Aníbal Fernández, no solo por la polémica, sino porque, para él, “es importante realizar esta presentación”

Se sintió como una intimidación”, expresó Dzwonik en La Noche de Mirtha por Canal 13. El humorista reconoció que ese tipo de actitudes “viene de hace tiempo” en el oficialismo, pero consignó que, en esta ocasión “se les fue de las manos”.

Además, dijo que estuvo “muy nervioso” toda la semana y lloró “por dos horas”. Y aclaró: “Quiero hablar poco de mis hijas porque ellas la pasaron mal también. La más chiquita lloró. La más grande me preguntaba si tenía que ir al colegio o si podía faltar esta semana”, contó. Y lamentó que esa situación haya ocurrido “después de un año y medio de falta de clases, otra vez la falta de chicos”.

“Hay un claro abuso de poder. Es un mensaje intimidatorio. No se puede meter con los chicos”, remarcó Nik. El humorista dio cuenta que el episodio generó preocupación en la comunidad educativa: “Estuve toda la semana hablando con papás, mamás, el rector. Todos, preocupados. ”, afirmó.