El ataque de los combatientes de Hamás en ciudades de Israel el sábado fue la incursión más mortífera desde los ataques de Egipto y Siria en la guerra de Yom Kippur hace 50 años y ha amenazado con provocar otra conflagración en el conflicto interminable.

En respuesta, los ataques aéreos israelíes alcanzaron bloques de viviendas, túneles, una mezquita y viviendas de funcionarios de Hamas en Gaza, matando a más de 400 personas, entre ellas 20 niños, en cumplimiento del voto de "poderosa venganza" del Primer Ministro Benjamín Netanyahu.

"El precio que pagará la Franja de Gaza será muy alto y cambiará la realidad durante generaciones", dijo el ministro de Defensa, Yoav Gallant, en la ciudad de Ofakim, que sufrió bajas y se tomaron rehenes.

Más allá de la bloqueada Gaza, las fuerzas israelíes y la milicia libanesa Hezbolá, respaldada por Irán , intercambiaron disparos de artillería y cohetes, mientras que en Egipto, dos turistas israelíes fueron asesinados a tiros junto con un guía.

Los llamados a la moderación vinieron de todo el mundo, aunque las naciones occidentales en gran medida apoyaron a Israel, mientras que Irán, Hezbolá y manifestantes en varias naciones del Medio Oriente elogiaron a Hamás.

El domingo, en el sur de Israel, hombres armados de Hamas todavía luchaban contra las fuerzas de seguridad israelíes más de 24 horas después de su sorpresivo ataque en múltiples frentes con ataques con cohetes y bandas de hombres armados que invadieron bases militares e invadieron ciudades fronterizas.

"Mis dos hijas son sólo bebés. Ni siquiera tienen cinco y tres años", dijo Yoni Asher, quien relató haber visto un vídeo de hombres armados palestinos secuestrando a su esposa y a sus dos hijas pequeñas después de que ella las llevara a visitarla. madre.

Uri David dijo en una conferencia de prensa que pasó 30 minutos hablando por teléfono con sus dos hijas, Tair y Odaya, durante un ataque hasta que ya no le respondieron y que no sabía su destino.

"Escuché disparos, gritos en árabe, les dije que se tumbaran en el suelo y se tomaran de la mano", dijo, rompiendo a llorar.

CAUTIVOS
El ejército de Israel, que enfrenta preguntas incómodas por no frustrar el ataque, dijo que había recuperado el control de la mayoría de los puntos de infiltración a lo largo de las barreras de seguridad, mató a cientos de atacantes y tomó prisioneros a docenas más.

El ejército dijo que había desplegado decenas de miles de soldados alrededor de Gaza, una estrecha franja de tierra que alberga a 2,3 millones de palestinos, y que estaba comenzando a evacuar a los israelíes alrededor de la frontera.

"Esta es mi quinta guerra. La guerra debería terminar. No quiero seguir sintiendo esto", dijo Qassab al-Attar, un palestino en silla de ruedas en Gaza cuyos hermanos lo llevaron a un refugio.

Israel no ha publicado un número oficial de cifras, pero sus medios dijeron que al menos 700 personas murieron, entre ellas niños. El portavoz militar Daniel Hagari la llamó "la peor masacre de civiles inocentes en la historia de Israel".

Al menos tres estadounidenses se encontraban entre los asesinados por hombres armados de Hamas, informó CNN, citando un memorando interno de Estados Unidos.

El impactante estallido puede socavar las medidas respaldadas por Estados Unidos para normalizar las relaciones entre Israel y Arabia Saudita, un realineamiento de seguridad que podría amenazar las esperanzas palestinas de autodeterminación y rodear al principal respaldo de Hamás, Irán.

El otro principal aliado regional de Teherán, el Hezbollah del Líbano , libró una guerra con Israel en 2006 y dijo que sus "armas y cohetes" apoyan a Hamás.

Mientras los escombros de los ataques todavía estaban esparcidos alrededor de las ciudades del sur y las comunidades fronterizas el domingo, los israelíes se tambaleaban al ver cuerpos ensangrentados en las calles, automóviles e incluso en sus casas.

Unos 30 israelíes desaparecidos que asistían a una fiesta de baile que fue atacada por hombres armados salieron de su escondite el domingo, informaron los medios israelíes, elevando el número de muertos en la reunión al aire libre a 260.

Los combatientes palestinos llevaron a Gaza a decenas de rehenes, incluidos soldados y civiles, niños y ancianos. Un segundo grupo militante palestino, la Jihad Islámica, dijo que tenía retenidos a más de 30 de los cautivos.

La captura de tantos israelíes, algunos de ellos atravesados ​​por controles de seguridad o conducidos sangrando a Gaza, es otro enigma para Netanyahu después de episodios pasados ​​en los que se intercambiaron rehenes por muchos prisioneros palestinos.

Se creía que entre los rehenes había un hombre y una mujer mexicanos .

"La cruel realidad es que Hamas tomó rehenes como póliza de seguro contra acciones de represalia israelíes, particularmente un ataque terrestre masivo y para canjear por prisioneros palestinos", dijo Aaron David Miller, miembro del Carnegie Endowment for International Peace.

VIOLENCIA SIN DISMINUCIÓN
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo que Washington enviaría múltiples barcos y aviones militares más cerca de Israel como muestra de apoyo y también comenzaría a proporcionar municiones nuevas a su aliado más cercano en el Medio Oriente.

En Gaza, el portavoz de Hamás, Hazem Qassem, condenó el anuncio de Estados Unidos como “una participación real en la agresión contra nuestro pueblo” y dijo que el grupo no se dejaría intimidar.

Hamás disparó más salvas de cohetes contra Israel el domingo.

Los ataques aéreos israelíes contra Gaza destruyeron las oficinas y los campos de entrenamiento de Hamás, pero también casas y otros edificios. El Ministerio de Salud palestino dijo que 413 palestinos, incluidos 78 niños, murieron y 2.300 personas resultaron heridas desde el sábado.

"Como potencia ocupante, Israel no tiene ningún derecho ni justificación para atacar a la población civil indefensa en Gaza o en cualquier otro lugar de Palestina", afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores palestino, denunciando una "campaña bárbara de muerte y destrucción".

La ONU dijo que al menos 70.000 palestinos en Gaza están buscando refugio en las escuelas que administra. Hizo un llamamiento a la creación de corredores humanitarios para llevar alimentos a Gaza.

En Khan Younis, en el sur de Gaza, la gente buscaba entre los restos de una mezquita a primera hora del domingo.

"Terminamos las oraciones nocturnas y de repente la mezquita fue bombardeada. Aterrorizaron a los niños, a los ancianos y a las mujeres", dijo el residente Ramez Hneideq.

La escalada sigue a la creciente violencia entre Israel y militantes palestinos en la Cisjordania ocupada por Israel, donde una autoridad palestina ejerce un autogobierno limitado, con la oposición de Hamás, que quiere destruir a Israel.

Las condiciones en Cisjordania han empeorado bajo el gobierno de extrema derecha de Netanyahu, con más incursiones israelíes y ataques de colonos judíos a aldeas palestinas, y la Autoridad Palestina convocó a una reunión de emergencia de la Liga Árabe.

El proceso de paz ha estado estancado durante años, y la política israelí se distrajo este año por disputas internas sobre los planes de Netanyahu de reformar el poder judicial.

Varias compañías aéreas internacionales dijeron el domingo que habían suspendido los vuelos que llegaban a Tel Aviv a la luz del ataque militante de Hamas contra Israel y que estaban esperando a que las condiciones mejoraran antes de reanudar el servicio.

Las compañías aéreas estadounidenses United Airlines (UAL.O) , Delta Air Lines (DAL.N) y American Airlines (AAL.O) dijeron que habían suspendido los vuelos directos, al igual que Air France (AIRF.PA) .

Las líneas aéreas estadounidenses normalmente operan servicios directos desde las principales áreas metropolitanas de EE. UU., incluidas Nueva York, Chicago, Washington, DC y Miami.

En un comunicado, United dijo que había operado dos vuelos programados a Estados Unidos desde Israel el sábado por la noche y la madrugada del domingo, pero que el servicio permanecería suspendido "hasta que las condiciones permitan que se reanuden".

Los representantes de Delta dijeron que estaban monitoreando la situación para hacer los ajustes de horario necesarios, pero que los vuelos "han sido cancelados esta semana".

Estados Unidos encabezó las denuncias occidentales de los ataques de Hamás, y el presidente Joe Biden emitió una contundente advertencia a Irán y otros países: "Este no es el momento para que ninguna parte hostil a Israel explote estos ataques".

El presidente iraní, Ebrahim Raisi, telefoneó al jefe de Hamás para felicitarle por la "victoria".

Para una nación con un alardeado servicio secreto que se jacta de infiltración y seguimiento de militantes, los ataques parecieron ser un impactante fracaso de inteligencia para Israel.

Los principales índices de la Bolsa de Tel Aviv cayeron un 6% el domingo (.TA35) , (.TA125) y los inversores esperaban que la violencia provocara un movimiento hacia el oro y otros activos de refugio seguro.

NOTA EXCLUSIVA---- INFORMACIÓN Y FOTO REUTERS 

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