ARGENTINA
10 de diciembre de 2021
Acuerdo con el FMI: dudas sobre los números y los tiempos de Martín Guzmán
La expectativa es lograr un acuerdo con el staff técnico del FMI antes de fin de año. La aprobación final sería en enero y luego se enviará al Congreso.(ambito)
La expectativa es lograr un acuerdo con el staff técnico del Fondo Monetario Internacional (FMI) antes de fin de año que incluya no solo la renovación de los vencimientos con este organismo, sino también el aporte de fondos frescos. Así lo señalaron fuentes de la Casa Rosada a Ámbito.
En este contexto, se espera con particular interés la información que traiga la misión argentina que se encuentra negociando en Washington y que tiene previsto su regreso al país el próximo sábado.
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El cronograma que adelantan fuentes del Gobierno contempla lograr el visto bueno del personal técnico del FMI antes del 31 de diciembre próximo – al respecto, destacan la “fluida” relación que el ministro de Economía, Martín Guzmán, cultivó con Julie Kozack, la Subdirectora en el Departamento del Hemisferio Occidental.
Una vez obtenida la aprobación del staff técnico, en el Gobierno se entusiasman con que el Directorio del organismo lo considere y avale hacia mediados de enero, cuando vuelva a reunirse tras el receso de fin de año. De cumplirse estos pasos, el acuerdo podría ser enviado para su aprobación al Congreso hacia febrero.
Ajustado
Sin embargo, quienes conocen las características de estas negociaciones señalan que para que se cumpla este “apretado” cronograma, sería necesario que una misión del FMI venga al país antes de que concluya el año.
Hasta el momento no se pudo confirmar, ni en fuentes locales ni en medios del organismo, cuándo visitará al país una misión del organismo.
En este contexto, otras fuentes consideran más probable que finalmente el staff técnico del FMI apruebe la propuesta argentina hacia enero, con el consiguiente tratamiento del acuerdo por parte del Board en febrero y el envío al Congreso en marzo.
La urgencia por lograr un entendimiento con el Fondo deriva de la acumulación de vencimientos con este organismo en los próximos meses, frente a una magra situación en materia de reservas en divisas. Entre diciembre y marzo se registran vencimientos con el FMI por 5.868 millones de dólares, cuando las reservas netas en poder del Banco Central suman unos 4.500 millones de dólares, según datos del economista Martín Polo de Cohen.
Sin embargo, un dato a tener en cuenta, según señalan analistas internacionales, es que el eventual incumplimiento de los compromisos no llevaría inmediatamente a que el Fondo declare en default a la Argentina, y menos si se encuentran encaminadas las conversaciones. En todo caso, se entraría en una situación de “arreas” (atrasos) en los pagos.
Acuerdo necesario
A favor del entendimiento con el Fondo, las distintas vertientes del Frente de Todos consideran que, tras la herencia recibida del macrismo y el paso de la pandemia, es necesario un acuerdo para no empeorar la situación del país.
En esta postura coinciden desde el presidente Alberto Fernández y la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner, al Instituto Patria y el sector representado por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.
Sin embargo, fuentes oficiales también señalan que existen diferencias en cuanto a la magnitud en que debe reducirse el déficit fiscal y la velocidad a la que las cuentas públicas deben llegar a una situación de superávit.
En este sentido, sectores como La Cámpora, organización liderada por Máximo Kirchner, se pronuncian a favor de una corrección gradual de los desequilibrios, que no frenen el crecimiento de la economía.
Cabe recordar que tanto el FMI como los economistas privados proyectan una expansión del PBI de sólo 2,5% para el 2022, por debajo del 4% contemplada en el proyecto de presupuesto y “el 5 ó 6% que se podría crecer” según la opinión de quienes están a favor de un acuerdo más laxo con el Fondo.
Dudas
También hay dudas dentro del oficialismo sobre la forma en que el ministro Guzmán está llevando adelante las negociaciones.
El titular del Palacio de Hacienda ya fue cuestionado públicamente por Cristina cuando le señaló que tenía margen para aumentar el gasto público.
En estos círculos se critica a Guzmán por llevar adelante “un ajuste encubierto” al punto que, calculan, la proyección actual de déficit fiscal primario se ubica en sólo 2,6% del PBI y se supone que terminará el año con un desequilibrio algo superior al 3% pero “por el adelanto de gastos para el año próximo”.
Tanto desde el kirchnerismo como desde la oposición (y algunos miembros del Gabinete Nacional) se critica lo que se considera el carácter “cerrado” con que gestiona el ministro Guzmán.
Muestra de ello es que, por ejemplo, entre los economistas de la oposición no se ha tenido ninguna consulta ni han recibido ningún dato sobre el programa plurianual que anunció el presidente y que está elaborando el titular del Palacio de Hacienda.
El origen del plan plurianual es un tema de debate dentro del oficialismo. Desde el Instituto Patria se señala que fue este sector del kirchnerismo el que impulsó la idea, mientras que desde la Casa Rosada se considera que fue una iniciativa del Poder Ejecutivo.
Desde ya que la articulación de este programa resulta compleja, particularmente por los diferentes puntos de vista que tienen sobre la política económica sectores del kirchnerismo y el ministro Guzmán, avalado por el presidente Fernández, según se señala en fuentes oficiales.
Desde esta perspectiva, rescatan el rol “conciliador” que está teniendo Sergio Massa en momentos en que la relación entre Alberto y Cristina está “dañada”, según coinciden en ambos entornos.
Por lo pronto, hasta los sectores más críticos del kirchnerismo consideran, según señalaron a Ámbito, que no sería conveniente un cambio al frente del ministerio de Economía en medio de las negociaciones con el Fondo.
Sin embargo, desde el entorno de Cristina se siguen escuchando críticas a la gestión del Gobierno y por lo tanto, planteando la necesidad de cambios en el Gabinete posiblemente para marzo.