Boris Johnson regresó el sábado a Gran Bretaña después de unas vacaciones para considerar una audaz candidatura a un segundo mandato como primer ministro en una contienda que podría enfrentarlo contra su exministro de Finanzas, cuya renuncia en julio ayudó a sacarlo de la presidencia. oficina.

Los candidatos potenciales para reemplazar a la primera ministra Liz Truss, quien renunció el jueves después de seis semanas en el cargo, se embarcaban en un frenético fin de semana de cabildeo para asegurar suficientes nominaciones para participar en la contienda por el liderazgo antes de la fecha límite del lunes.

Johnson, quien estaba de vacaciones en el Caribe cuando Truss renunció, no ha comentado públicamente sobre una oferta para su antiguo trabajo. Ha recibido el apoyo de decenas de legisladores conservadores, pero necesita 100 nominaciones para ser considerado.

El ministro del Departamento de Comercio, James Duddridge, dijo el viernes que Johnson le dijo que estaba "dispuesto a hacerlo". Dijo el sábado que Johnson había obtenido 100 nominaciones, aunque un conteo de Reuters lo colocó en poco más de 40 y Rishi Sunak, un exministro de finanzas cuya decisión de renunciar ayudó a derribar a Johnson, en más de 110.

El nuevo primer ministro, un puesto que habrá cambiado de manos tres veces en cuatro años, se enfrenta a una enorme bandeja de entrada después de que los planes económicos de Truss provocaron turbulencias en los mercados de bonos, elevaron los costos de endeudamiento del gobierno y agregaron más tensiones a los hogares y las empresas que ya luchan con un costo- crisis de la vida.

El Sunday Times informó que Sunak, por ahora el favorito de los corredores de apuestas, y Johnson podrían enfrentarse el sábado por la noche. No dio detalles sobre ninguna discusión planeada.

Solo la exministra de Defensa Penny Mordaunt ha declarado formalmente que se postulará, aunque un recuento de Reuters mostró que hasta ahora solo tenía 22 nominaciones antes de la fecha límite del lunes a las 13:00 GMT.

Johnson fue abucheado por algunos pasajeros en el avión a Gran Bretaña, informó un reportero de Sky News en el vuelo. Con una chaqueta oscura y una mochila, Johnson saludó a los fotógrafos después de aterrizar en el aeropuerto Gatwick de Londres y antes de partir.

Sería un regreso sorprendente para el experiodista y exalcalde de Londres, quien dejó Downing Street envuelto en un escándalo y dijo que los legisladores del partido "cambiaron las reglas a la mitad" para evitar que cumpliera un mandato completo.

En un impulso a Sunak, otro posible contendiente, el ministro de comercio Kemi Badenoch, quien compitió en una carrera por el liderazgo a principios de este año, respaldó al exministro de finanzas y, por lo tanto, se descartó de otra candidatura para el puesto principal.

La perspectiva de otro cargo de primer ministro de Johnson es un tema polarizador para muchos en el Partido Conservador, que está profundamente dividido después de despedir a cuatro primeros ministros en seis años.

Para algunos legisladores conservadores, Johnson es un ganador de votos, capaz de atraer a todo el país con su imagen de celebridad y su marca de optimismo enérgico. Para otros, es una figura tóxica que lucharía por unir al partido y, por lo tanto, podría socavar los esfuerzos por construir un liderazgo estable para calmar los agitados mercados financieros.

La exministra del Interior, Priti Patel, dijo que su antiguo jefe tenía "el mandato de entregar nuestro manifiesto electo y un historial comprobado de tomar las decisiones importantes correctamente".

Andrew Bridgen, otro legislador conservador, dijo que podría renunciar al grupo parlamentario si Johnson regresa y les dice a los conservadores que no creen un "culto a la personalidad" de Johnson.

El ex líder del Partido Conservador, William Hague, dijo que el regreso de Johnson conduciría a una "espiral de muerte" para el partido.

Actualmente, Johnson está siendo investigado por el Comité de Privilegios del Parlamento para establecer si mintió a la Cámara de los Comunes sobre las fiestas que rompieron el confinamiento. Se espera que renuncien los ministros que hayan engañado a sabiendas al parlamento.

El concurso se ha acelerado para tomar sólo una semana. Según las reglas, solo tres candidatos podrán llegar a la primera votación de legisladores el lunes por la tarde, y los dos últimos se someterán a una votación el viernes limitada a unos 170.000 miembros registrados del Partido Conservador.