DEPORTES
1 de agosto de 2021
DELFINA PIGNATIELLO: "NECESITO PRIORIZAR MI SALUD MENTAL"
La nadadora de 21 años, quien debutó en un Juego Olímpico en Tokio 2020, tomó una dura decisión tras recibir insultos de todo tipo a través de las redes sociales.
La gente es muy cruel, y por más que ignore quiero cuidar mi salud mental por sobre todas las cosas”. Delfina Pignatiello tomó una drástica decisión en redes sociales y plataformas de stream tras su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y las críticas que recibió por parte de los “haters”: dejó de escribir en Twitter, puso en privado su cuenta de Instagram y restringió comentarios, borró videos y fotos de su cuenta secundaria (@Soulisbw), eliminó todos sus videos de su canal de Youtube (con 72.500 suscriptores y un millón y medio de vistas) y solo quedó un mensaje en su Twitch (“Ya no hago más streams, gracias a los que me bancaron siempre”). La nadadora de 21 años ya había dado señales de su bronca en los últimos año ante las críticas por su desempeño en los 1500 y 800 metros libre en el Aquatics Centre tokiota.
“Perdón, de corazón. Me encantaría seguir haciendo streams y seguir con el canal de Youtube, pero estoy en una situación que me sobrepasa. Me siento muy lastimada y necesito priorizar mi salud mental y bienestar. No sé qué pasará de acá en adelante, pero sepan que los voy a extrañar. Y muchas gracias por el aguante. Me lo llevó en el corazón”, publicó Pignatiello en Discord, además de dejar otros mensajes su cuenta secundaria de Instagram en los que destacó que “la gente es muy cruel” y que iba a borrar sus cuentas.
Pignatiello, habitualmente activa en redes, decidió restringir el acceso a su Instagram, además de borrar su cuenta secundaria
El jueves pasado, seis horas antes de la tercera serie de clasificación de los 800 metros libre, Pignatiello compartió una frase de la patinadora británica Elise Christie sobre el caso Simone Biles: “Estoy orgullosa de que puso su bienestar por encima de todo. Estoy con ella, como todos deberíamos. Ella es un modelo a seguir, una inspiración. Los Juegos Olímpicos no siempre se tratan de medallas. Se trata del espíritu”. Toda una declaración de principios. Un mensaje que sigue retumbando en la cabeza de la sanisidrense. “El otra día veía una parte de una entrevista en la que decía que hay que disfrutar. Es algo que debo recordármelo”, sentenció frente a las cámaras de TV, minutos después de una serie en la que no solo terminó última sino que lo hizo con un tiempo inesperado: 8m44s/85. Fue su segundo mal resultado en una semana, tras el también inesperado 16m33s/69 en los 1500. Su estreno olímpico estuvo lejos de sus mejores marcas y ella reaccionó con autocrítica y mensajes hacia el futuro -mirando al ciclo que se inicia camino a París 2024-. Pero no pudo contenerse en redes sociales, donde necesitó reaccionar a tiempo para ponerle un freno a los malos comentarios.
Siempre tuvo que lidiar con la presión. Una mochila que cargó en los Juegos de la Juventud 2018, que supo quitarse en los Panamericanos de Lima 2018 -llegó como favorita y recién se pudo liberar con el pasar de las pruebas, y las medallas de oro-, pero que terminó siendo demasiado pesada en Tokio 2020. Aquella mención al “disfrute” es el camino que parece necesitar, mientras se cierra en su familia (ya le había dedicado mensajes a sus padres tras los 1500 metros) y deja de lado su costado más histriónico.