No se trata de que Ucrania renuncie a la ciudad de Mariupol y deponga las armas, dijo el lunes la viceprimera ministra de Ucrania, Iryna Vereshchuk.

"No puede haber ninguna cuestión de rendición, abandono de las armas", dijo Vereshchuk citado por el portal de noticias Ukrainska Pravda. "Ya hemos informado a la parte rusa sobre esto".

El domingo, Rusia exigió que las fuerzas ucranianas depongan las armas en la sitiada ciudad portuaria del este.

El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, reprendió a Israel en un discurso ante su parlamento el domingo, preguntando por qué no estaba proporcionando defensas antimisiles a su país o sancionando a Rusia por su invasión.

En respuesta a Zelenskiy, el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid, no se comprometió y dijo en un comunicado que Israel, que envió un hospital de campaña y otra ayuda humanitaria a Ucrania, continuaría ayudando a su pueblo "tanto como podamos".

Mediador en la crisis Ucrania-Rusia, Israel ha condenado la invasión rusa. Pero ha tenido cuidado de tensar las relaciones con Moscú, un poder en la vecina Siria, donde las fuerzas israelíes atacan con frecuencia a las milicias pro iraníes.

“Todos saben que sus sistemas de defensa antimisiles son los mejores… y que definitivamente pueden ayudar a nuestra gente, salvar las vidas de los ucranianos, de los judíos ucranianos”, dijo Zelenskiy, quien también es judío, a la Knesset en una videollamada.

“Podemos preguntar por qué no podemos recibir armas de ustedes, por qué Israel no ha impuesto fuertes sanciones a Rusia o no está presionando a las empresas rusas”, dijo en el discurso, uno de varios que ha hecho ante legislaturas extranjeras.

Mencionó el sistema Cúpula de Hierro de Israel, a menudo utilizado para interceptar cohetes disparados por militantes palestinos en Gaza.

Mientras 

Los gobiernos de la Unión Europea considerarán si imponen un embargo petrolero a Rusia por su invasión de Ucrania mientras se reúnen esta semana con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para una serie de cumbres diseñadas para endurecer la respuesta de Occidente a Moscú.

Buscando forzar una retirada militar de Ucrania por parte del presidente ruso, Vladimir Putin, la UE, junto con los aliados occidentales, ya ha impuesto una panoplia de sanciones punitivas, incluida la congelación de los activos del banco central ruso.

"Estamos trabajando en una quinta ronda de sanciones y se están proponiendo muchos nombres nuevos", dijo un alto diplomático de la UE bajo condición de anonimato porque las discusiones no son públicas.

Los gobiernos de la UE retomarán la discusión entre los ministros de Relaciones Exteriores el lunes, antes de que Biden llegue a Bruselas el jueves para las cumbres con los 30 aliados de la OTAN, así como la UE y en un formato de Grupo de los Siete (G7) que incluye a Japón.

Hasta ahora, el Kremlin no se ha movido para cambiar de rumbo en Ucrania por cuatro rondas de sanciones de la UE impuestas en las últimas tres semanas, incluso a 685 rusos y bielorrusos y a las finanzas y el comercio rusos.

Eso deja al bloque con la opción económicamente más difícil de apuntar al petróleo ruso, como lo han hecho Estados Unidos y Gran Bretaña, pero no las 27 naciones de la UE, dada su dependencia del gas ruso para la energía.

Los diplomáticos dijeron a Reuters que los países bálticos, incluida Lituania, están presionando por un embargo como el siguiente paso lógico, mientras que Alemania advierte que no se debe actuar demasiado rápido debido a los altos precios de la energía en Europa.

Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero. Putin calificó las acciones de Rusia como una "operación especial" destinada a desmilitarizar Ucrania y purgarla de lo que considera nacionalistas peligrosos. Ucrania y Occidente dicen que Putin lanzó una agresiva guerra de elección.

FRANCIA DICE 'SIN TABÚES' SOBRE LAS SANCIONES

Moscú ha advertido que las sanciones de la UE sobre el petróleo ruso podrían incitarlo a cerrar un importante gasoducto hacia Europa. La UE depende de Rusia para el 40% de su gas, con Alemania entre las más dependientes de las grandes economías de la UE.

Alemania es también el mayor comprador de la UE de crudo ruso.

Bulgaria, que depende casi por completo del suministro de gas de Gazprom de Rusia, ha dicho que podría optar por no participar. La única refinería de petróleo de Bulgaria es propiedad de la rusa LUKOIL (LKOH.MM) y proporciona más del 60% del combustible utilizado en el país balcánico